Seguramente sean miles los consumidores y pequeños inversores que han perdido todo el dinero que invirtieron en las Cuotas Participativas de la CAM, principalmente en las provincias de Alicante y Valencia. Entre los perjudicados por este producto de inversión tóxico se encuentran numerosos expatriados de todas las nacionalidades, a los que en la mayoría de los casos su banco les ocultó la realidad, pues estaban contratando un producto complejo, de alto riesgo, no garantizado, etc.
Las Cuotas Participativas que fueron vendidas, tal y como ha reconocido la jurisprudencia, son valores de renta variable, mucho más complejos que las acciones normales de las Sociedades, además su valor, no solo dependía del beneficio de la entidad CAM, sino del uso que se le quisiera dar al mismo y qué parte se quería destinar a dichas cuotas. Además no tienen plazo de amortización, por lo tanto son perpetuas, aunque la CAM si podía amortizarlas, y sus titulares en el supuesto de una insolvencia serían los últimos en cobrar.
Nos consta que la CAM en su día las comercializó como una inversión común, un deposito o similar ordinario, y que en ningún momento explicó de forma suficiente la naturaleza del producto, ni sus riesgos, etc. Lamentablemente a día de hoy el valor actual de las Cuotas Participativas de la CAM es 0€.
Debemos recordar en este punto, que la ley española en relación con este tipo de inversión, exige que el banco explique de una forma clara y suficiente, la naturaleza de la inversión, sus riesgos, debiendo entregar información adecuada sobre los instrumentos financieros, los riesgos asociados, etc.
Según parece, y así ha sido publicado por algún periódico de tirada nacional, la CAM de una forma premeditada y orquestada, diseñó una estrategia destinada a convencer a sus clientes para que invirtieran en este producto, con ocultación de la naturaleza real del mismo, habiendo entregado a sus empleados una especie de protocolo de actuación, donde se indicaba como se tenía que vender el producto, que decir en cada caso, etc. Incluso, un exconsejero de la CAM, calificó de exceso grave las cuotas participativas por no explicar qué se estaba comprando.
Afortunadamente, nuestro despacho ha podido ayudar satisfactoriamente a varios clientes afectados por las Cuotas Participativas de la CAM a reclamar el dinero invertido. Contáctenos y le ayudaremos.
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Carlos Baos (Abogado)
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